Los eventos no solo se miden por la asistencia o por la cantidad o calidad de las ponencias, sino por las conexiones que se generan., esto es algo que saben los organizadores de eventos. Hacer networking no consiste solo en entregar tarjetas ni acumular contactos de LinkedIn. Se trata de poco a poco ir construyendo relaciones con propósito, y eso —como todo en los eventos— se debe preparar con estrategia.
Aprender cómo hacer networking en un evento de forma eficaz puede marcar la diferencia entre asistir y realmente aprovechar la experiencia. No se trata de hablar con todo el mundo, sino de conectar con las personas adecuadas.
Antes del evento: planifica tus conexiones
La mayor parte del trabajo hay que hacerla antes de poner un pie en el espacio elegido para el evento ( hoteles, audotorios, palacios de congresos, centros de convenciones,.. o espacios singulares). Para hacer un buen networking debemos investigando el listado de asistentes, ponentes o empresas expositoras. Si el evento cuenta con una app de matchmaking o una herramienta de gestión de reuniones (cada vez más habitual en los eventos), aprovéchala.
Marca tus objetivos: ¿quieres encontrar nuevos partners? ¿abrir oportunidades comerciales? ¿posicionar tu marca? Tenerlo claro te ayudará a elegir con quién hablar y, sobre todo, cómo hacerlo. En los eventos más productivos, no se deja nada al azar.
Durante el evento: menos tarjetas, más conversaciones
Saber cómo hacer networking en un evento implica mucho más que repartir tarjetas. En un entorno lleno de estímulos, destacar no significa hablar más, sino conectar mejor.
Prepara una breve presentación sobre quién eres y qué haces, pero evita el discurso memorizado. Escucha, pregunta, muestra interés. Los profesionales con los que te cruces recordarán más cómo los hiciste sentir que tu cargo en la empresa.
Y no subestimes los momentos informales: los coffee breaks, los almuerzos, los afterworks… muchas de las colaboraciones más interesantes surgen en esas charlas aparentemente casuales, lejos de los stands o las ponencias.
Usa la tecnología a tu favor
Hoy en día, el networking va más allá del cara a cara. Las herramientas digitales de gestión de reuniones, las plataformas de agenda o las app de matchmaking — permiten organizar reuniones y optimizar cada minuto del evento.
Planificar tus encuentros con antelación, evitar solapamientos y tener una visión clara de tu agenda te da una ventaja competitiva. Además, muchos tipos de eventos corporativos incluyen espacios donde podemos reuninrnos, charlar,.. incluso hay espacios virtuales que ofrecen excelentes oportunidades de networking digital.
Después del evento: donde empieza el verdadero trabajo
El evento puede terminar, pero el networking no. Si quieres que las conexiones se conviertan en relaciones, dedica tiempo al seguimiento. Envíales un mensaje personalizado, menciona algún detalle concreto de la conversación y mantén vivo el contacto.
No se trata de insistir, sino de cuidar. Un simple “encantado de coincidir contigo, seguimos en contacto” puede abrir muchas puertas si se dice en el momento adecuado.
Y si el siguiente paso es una reunión, asegúrate de que sea fácil de coordinar. En ese punto, herramientas como Meetbooker hacen la diferencia: simplifican la gestión de espacios y tiempos para que tus relaciones profesionales se traduzcan en oportunidades reales.



